PAGINA SIETE.- Sin un registro oficial ni programas de ayuda, Bolivia deja en el olvido a los niños, adolescentes y jóvenes que quedaron en la orfandad a causa de la Covid-19. En países como Perú y Paraguay, sus gobiernos ya realizan la recopilación de datos y la elaboración de leyes para ofrecer programas de ayuda que incluyen entrega de bonos y becas.
“Se debería elaborar un registro de los huérfanos de la Covid-19 para dar respuestas a la población, en especial a las personas más vulnerables”, manifestó el presidente del Colegio Médico de Bolivia, Luis Larrea.
El representante del sector indicó que hasta la fecha, 300 profesionales de salud perdieron la vida por la Covid-19 y sus familias -en muchos casos a cargo de hijos menores de edad- no tienen respuesta del Gobierno.
El secretario ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas de Salud (Sirmes), Fernando Romero, sostuvo que el Gobierno debería contar con un registro de los menores de edad que quedaron en la orfandad a causa de la pandemia. Aseguró que el Estado está en deuda con muchos de sus colegas y trabajadores de salud que perdieron la vida a causa de la Covid-19 en primera línea.
En el país, muchos de los jóvenes, adolescentes y niños que perdieron a sus padres viven un calvario porque se deben encargar de los hermanos menores o pagar deudas a los médicos por internación en clínicas. En muchos casos, sus seres queridos batallaron contra el coronavirus en salas de terapia intensiva.
“Vivimos una situación muy complicada por la muerte de mi papá y mi mamá. Es muy duro”, contó Williams C, de 15 años.
El adolescente perdió a sus padres hace menos de un mes y contó que ahora su hermana mayor se hace cargo como tutora de él y de su hermana.
En Paraguay, la primera semana mayo, el Gobierno habilitó una plataforma para registrar a todos los niños, adolescentes y menores de 18 años que quedaron huérfanos por la Covid-19.
El objetivo de este plan es la implementación de programas específicos de ayuda social.
Dos semanas después, la Cámara de Diputados de Paraguay aprobó una propuesta de protección especial para niños huérfanos a causa de la Covid-19.